Mostrando entradas con la etiqueta momentos. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta momentos. Mostrar todas las entradas

mayo 10, 2010

Las mujeres de mi vida.





Tener una mamá así o ser una mamá así, no tiene precio.

Sé dice fácil, en mi caso fue de las primeras palabras que pronuncié, de hecho, si lo piensan es de las primeras cosas que te enseñan a escribir en la escuela no? ma-má. Habrá que preguntarles si así de fácil como se escribe y dice, es serlo.


Hoy es el día de las Madres en México  y es el primero que paso a cientos de kilómetros de mi Mami. No puedo evitar sentirme nostálgica y desear con toda mi alma el poder abrazarla con todas mis fuerzas y quedarme dormida en sus brazos como cuando era niña, cuando no tenía más preocupación que seguir jugando.


Hoy que estoy lejos Mami, agradezco cada segundo que pasaste a nuestro lado para crearnos un mundo fantástico, lleno de esperanza y de amor. 


Por enseñarme que lo más importante es como haces sentir a la gente y como te hacen sentir a ti. Por demostrarme que la fortaleza se lleva en el corazón y que nada es imposible mientras se está vivo. Por alcahuetearme en cada una de mis locas ideas y en mis sueños por más inalcanzables que parezcan. Por aguantar todas mis travesuras y mis malos genios. 


Por escucharme pacientemente en los días buenos, en esos malos, malos y en los tristes; llorar conmigo y hacerme sentir que sientes lo mismo que yo. Por estar ahí, no importa qué pase.


Gracias por enseñarme que cada día es un nuevo comienzo, que a veces hace falta llorar para desahogarse y que depende de mi actitud cuánto tiempo dure un mal momento. Gracias por darme esa luz que abre corazones y me deja entrar en ellos. Por inculcarme el amor a la vida, por hacerme una guerrera, por ayudarme a hacer magia. Por tu amor incondicional. Extraño tanto mis pláticas de horas en el nextel mientras sufría en el tráfico, los momentos de belleza, los días de playa tiradas como lagartijas, las tardes de cocinar galletas navideñas, las idas al mandado, las pláticas filosóficas, la guerra de cosquillas (te acuerdas?). Pero sobre todo tus abrazos, el escuchar tu corazón que me tranquiliza, me da paz y me hace sentir que si el mundo se acaba, estando entre tus brazos no pasa nada. TE AMOOOOO!!!


Tía, para mi tú eres como mi segunda mamá y no puedo dejar de agradecerte todo el cariño que me has dado desde que nací. Gracias por estar en cada momento importante de mi vida, por apoyarme en los momentos en donde no veía la luz al final del camino. Por darme fortaleza, consejos y mucho, mucho amor. Por alcahuetearme en mis locuras, por reírte de mis patoaventuras y regañarme cuando me paso de la raya. Por siempre estar alentándome para no darme por vencida, por ayudarme a hacer que las cosas sucedan. Por enseñarme a sacar el carácter de los González y a hacerme escuchar cuando es necesario. A hacerme dura cuando hay que serlo y noble cuando lo merecen. Por cuidarme, protegerme y quererme así tal cual soy. Te adorooooo!!!


Abue, no podía dejar de hablar de ti. Has sido un gran ejemplo para mi de fortaleza, de coraje, de valentía. De ti aprendí a no darme por vencida, a luchar por lo que se quiere no importando cuánto tiempo tenga que pasar. Aprendí el valor de la familia y que la unión hace la fuerza. Aprendí a valorar los sacrificios que a veces se tienen que hacer para sacar adelante a la familia y mantenerla unida. A que la belleza no es gratis y que hay que quererse y cuidarse para verse como tú cuando tenga 100 jaja. que la fodonguez es un pretexto que no me puedo permitir. Pero sobre todo a sonreír, sin importar qué pase. A cantar las penas y las alegrías. Te adoro Abue!!


Tías gracias por enseñarme que siempre hay que ir en busca de la felicidad (Paty), que lo importante es no dejar de intentar (Quita), que no puedes quedarte a esperar que las oportunidades te lleguen, que es cuestión de actitud (Marta), que todo hay que tomarlo con buen sentido del humor (Alice), que la familia siempre será mi refugio (Güera), que el amor de una madre es incondicional y que siempre estarán ahí para nosotros (Maribel).


Y a todas mis primas Claudia, Gomis, Mitzia, Karina, Emma, Yael y mis amigas Dul, Pao, Vane, April, Chant... MUCHAS FELICIDADES MAMAS... las quiero y admiro.


A todas las mamas del mundo MUCHAS, MUCHAS FELICIDADES!!


Les dejo una canción que a mi personalmente me gusta cantarle a mi mamá... con todo mi corazón Mami, te amooooo!!! 

febrero 10, 2010

Lección 4: Vive como si no hubiera un mañana.



"Siempre hay un mañana y la vida nos da otra oportunidad para hacer las cosas bien, pero por si me equivoco y hoy es todo lo que nos queda, me gustaría decirte cuanto te quiero, que nunca te olvidaré" Gabriel García Márquez.


Empezaré por contarles una historia de la vida real. Hace catorce años una persona que yo quiero mucho, cuyo nombre no revelaré, tuvo un accidente en motocicleta. De camino al hospital, preparaba mentalmente todo lo que le iba a decir. Cuando al fin tuve la oportunidad de verlo, el mundo se detuvo por un instante, me quedé muda sin poder pronunciar palabra y sólo me conformé con tomar su mano y apretarla fuerte, deseando que él, inconsciente como estaba, pudiera leer mi mente. Que por qué no le dije nada, aún ni yo misma lo sé, en su momento tuve mil pretextos: es que había una persona más en la habitación y me dio pena, estaba dormido, no podía escucharme, no era el momento, mejor en otra ocasión. La cual nunca más volvió porque al otro día su corazón dejó de latir, su muerte cerebral era inminente y nada más se pudo hacer.

Desde aquel día, me prometí no volver a "dejar para mañana lo que pude haber dicho o hecho hoy" , pero debo confesar que como todas las lecciones de la vida es muy difícil no caer en este vicio de posponer y más cuando esto incluye el decir lo que sientes cuando lo sientes. 

Vienen a mi mente cientos de situaciones que a diario vivimos y que son muestra de lo que digo; como dejar que se acumulen los trastes sucios, estudiar un día antes del examen, no cambiarse de trabajo aún cuando se tiene el mismo sueldo y las mismas responsabilidades desde hace dos años, seguir en una relación cuando ya no hay amor, empezar la dieta, ir al gimnasio, independizarte... le sigo??? 

Todos en algún momento hemos atrasado una tarea o una decisión, con cualquier pretexto: hoy no puedo, es que no hay trabajo, es que todavía no es el momento, es complicado no puedo dejarlo, nada más este pastelito, ya mañana la empiezo, mañana me levanto temprano y voy a correr, mañana le digo que me gusta... les suena familiar?. Son las excusas que todos los días decimos para justificar nuestra desidia,falta de motivación, irresponsabilidad, miedo, apatía, indecisión, desconfianza, dependencia o una mezcla de todas.

Aceptémoslo, por postergar las cosas o las decisiones, muchas veces nos hemos perdido de grandes oportunidades. Como dicen por ahí, más vale arrepentirse de lo que hiciste y no de lo que dejaste de hacer.

Hace algún tiempo conocí a una señora ya mayor y todos los días de su existencia se lamenta porque dejó que otras personas decidieran la vida que tenía que vivir. Hoy tiene ya más de setenta años, vive del hubiera y con un corazón amargado por haber dejado para después sus sueños. Yo siempre le digo que nunca es tarde, cuantos ejemplos no salen a diario en la televisión de personas que logran su sueño cuando nadie creía que sería posible. Lo importante es dejar de lamentarse, dejar el miedo, la dependencia, la desconfianza, la apatía y creer en que todo es posible, pero no es gratis. Se necesita de esfuerzo, de energía, de caerse y levantarse, de tenerse fe.

La realidad es que la vida no es eterna como solemos pensar y aunque suene a cliché no sabemos si el día de mañana estaremos vivos para hacer todas esas cosas que queremos hacer o que queremos decir.

Debo decir que si bien por un momento dejé de dar el cien, cerré mi corazón y me volví incrédula de los sentimientos y buenas intenciones de los demás por miedo a que me lastimaran de nuevo o dar más de lo que recibía. He aprendido que además de no postergar, lo más importante es que no importa qué o quién, la vida hay que vivirla con pasión y entregar todo. Puede que se sufra más, pero también te sabe mejor. Hay una frase que amo que dice que "la vida no se trata de las veces que respiras, sino de los momentos que te han quitado el respiro". 

Cada quién sabe como aprovecha su tiempo y su vida, lo único que puedo decir es que en mi caso me emociona tanto poder llegar a los 90 años como mi abuela, con el corazón lleno de satisfacciones y la convicción de saber que no hubo sueño por grande que este fuera que no haya hecho realidad. Dormirme todos los días de mi vida tranquila, sabiendo que si no hubiera un mañana para mi, la gente sabe cuanto la quise, que yo disfruté y aproveché cada microsegundo que respiré y estoy en paz.

Yo no soy mucho de hacer listas o de seguir reglas, pero si de algo me ha servido tener una es para no perder nunca de vista eso en lo que sueño. Y tengo que decir con mucho orgullo que la sensación de borrar uno a uno cada objetivo de esa lista es una de las cosas que mejor sabor de boca me han dejado.

Aprovecho por agradecerle a mis papas la oportunidad de hacer que yo hoy esté aquí, haciendo realidad uno de mis sueños.


Les dejo la canción que me inspira cada que la escucho y el trailer de la película "The bucket list" o Antes de partir para que dejen de pensar en mañana y aprovechen hoy para decir y hacer lo que sienten.

.


 

febrero 02, 2010

Lección 3: Hay que dejar ir, soltar, desprenderse.



En ninguna parte soy algo de alguien y en ninguna parte hay algo que sea mío. Álvaro Pinto.

Esta es una frase que un amigo un día escribió en su facebook y hasta hoy le encuentro el verdadero significado y hasta he llegado a pensar que fue una de tantas señales que estaban ahí, para mostrarme una lección más. 


Hace unos días me robaron mi bolsa con todo, dinero, tarjetas, celular, cámara, identificaciones; y más allá de lo material, lo que más me dolió fue perder esos mensajes que guardé con tanto recelo y que seguramente conforme pase el tiempo se quedarán en el olvido. Y fue entonces cuando comprendí aquella frase que una amiga me dijo cuando lloraba desconsolada porque había perdido mi información de la computadora: "hay que aprender a desprenderse de las cosas" yo agregaría " y a no apegarnos a las personas".


No hace mucho, platicando con otra amiga sobre mi nueva afición por comprar una postal de cada lugar que visito, me decía que ella hizo lo mismo cuando vivió en Europa, todo guardaba, todo coleccionaba, hasta que hace poco se hartó y se dio cuenta de que sólo eran cosas que le estorbaban y le quitaban espacio. Se deshizo de todo, sin remordimientos. Me quedé atónita, yo no sé si puedo concebir mi vida sin mi baúl  de los recuerdos, esa caja con mi primer diario, la primera rosa, las cartitas de amor, las fotos... pensar en tirarlo todo, TODO, es un sacrilegio!!.


Sin embargo, hoy entiendo que  la vida, así como las cosas, tienen ciclos, etapas que llegado el momento cumplen su función. Inevitablemente se tienen que ir cerrando círculos y hay que dejarlos ir, soltarlos. Bien dice Paulo Coelho "...no podemos ser niños eternos, ni adolescentes tardíos, ni empleados de empresas inexistentes, ni tener vínculos con personas que no quieren estar vinculados con nosotros". La vida siempre es ver hacia delante, nunca para atrás dicen por ahí.


Y es entonces cuando un remolino de sentimientos me atacan, por un lado me dicen que hay que dejar espacio para las cosas nuevas y que al final nada de lo que acumulas te llevas, que debes desprenderte de todo lo que es una carga y que mientras más ligero viajes mejor. Debo decir que estoy totalmente de acuerdo en aquello de no guardar resentimientos, de desechar todo lo que no sirve y alejarte de las relaciones que te lastiman y que no aportan nada bueno a tu vida. Sin embargo, no creo que deshacerte de todos esos recuerdos que vas guardando, te hará sentirte mejor o más ligero.  Son pequeñas cosas que te transportan a un momento vivido que por muy doloroso que haya sido te ha hecho la persona que eres.


Creo que como todo, es necesario encontrar el equilibrio entre lo que debes soltar, dejar ir y lo que puedes conservar como parte de tus memorias cuando estés viejo y sólo vivas de ellas. Sin embargo, con las personas es diferente, porque tendemos a involucrar sentimientos más profundos y el perder a una persona o alejarte de ella no es tan fácil como romper sus cartas o tirar sus rosas a la basura. Siempre existe la posibilidad de volvértela a encontrar o de saber de ella. Pero el hecho de que no sea fácil, no significa que por ello no lo debamos hacer. De nada sirve estar en donde no lo quieren o donde uno no se siente bien. Tampoco estar viviendo del pasado, añorando aquello que fue y que hoy ya no tienes o que nunca tuviste. Dar carpetazo y escribir en una hoja nueva es necesario y como leí una vez por ahí si sientes que algo quedó sin resolver y lo puedes arreglar en el momento hazlo, sino cierra el círculo y no mires atrás. 


Al final lo que aprendí es que no es lo que acumulemos, sino la actitud de dependencia que tenemos hacia las cosas , los afectos y las personas. En la medida que entendamos que nuestra felicidad únicamente depende de nosotros y que somos únicamente a nosotros nos corresponde decidir sobre nuestras vidas, en ese momento lograremos desprendernos de las cosas sin remordimiento y  alejarnos de aquellas personas que ya no necesitamos en nuestras vidas. 


Nada, ni nadie es indispensable, lo sabemos y aún así sufrimos y no nos conformamos con perder esos momentos y a esas personas que por un instante marcaron nuestras vidas. Siendo que en realidad no perdemos, ganamos la experiencia de haberlo vivido. Lo importante es como bien dice mi amigo entender que "en ninguna parte somos de alguien y en ninguna parte algo es nuestro"  y que vivir de recuerdos, no es vivir. Hay que rodearnos de recuerdos, de cosas, de personas que sumen, que nos hagan ser mejores personas, con las cuales podamos compartir nuestra existencia tal cual somos. 

Les recomiendo que vean la película de Up in the air: